Los romanos llamaban a esta región el fin del mundo, Finis terrae: a lo largo de sus más de 1000 km de costa se suceden bahías pintorescas, acantilados, largas playas de arena, puertos de pescadores y una multitud de islas costeras.
La calidad nuestra prioridad
Cada una de nuestras propiedades es revisada antes de su llegada para asegurar la mejor estancia posible.