Vacaciones con niños en Portugal

Portugal es un destino de vacaciones diverso y con variedad de planes, por lo que los viajeros con niños encontrarán aquí una gran cantidad de lugares y actividades familiares. A lo largo del soleado Algarve, las playas de ensueño invitan a pasar días de relax junto al mar. La diversión del baño y el senderismo pueden combinarse bien en la florida isla de Madeira o en las lejanas Azores, en el Atlántico. Ciudades como Lisboa, Oporto o Albufeira desprenden un encanto especial y ofrecen a las familias numerosas actividades de ocio. Los amantes de los animales pueden visitar los numerosos zoológicos o hacer incursiones por parques naturales como el paisaje de la laguna de Ria Formosa.

Lisboa, una de las ciudades más carismáticas

Las pequeñas y coloridas callejuelas de la capital portuguesa encantarán a grandes y pequeños, al igual que un recorrido en el histórico tranvía que recorre la metrópoli desde 1873. También es muy recomendable un paseo en uno de los tres funiculares amarillos. Después de visitar importantes monumentos como la blanca Torre de Belém o el monasterio gótico Mosteiro dos Jerónimos, una visita al zoo hará las delicias de los pequeños amantes de los animales. Lo más destacado es el teleférico con cabinas abiertas, desde el que se puede observar a gran parte de los animales que viven allí. No deje de visitar a los delfines, que son una de las atracciones favoritas de los visitantes. Podrá maravillarse con otras criaturas marinas en el oceanario, el mayor acuario cubierto de Europa. En esta zona se pasean tiburones, rayas y muchos bancos de peces. En el rincón antártico, unos simpáticos pingüinos se pasean por su glaciar artificial. Para variar y relajarse, pruebe las playas de las afueras de la ciudad, como la Praia de Carcavelos. 

Tranvía amarillo en Lisboa

Oporto, viaje por el Duero

Esta ciudad del norte de Portugal está situada de forma pintoresca a orillas del río Douro y es muy conocida por los adultos gracias a su buen vino. Los niños, en cambio, se sienten atraídos por la librería Livraria Lello, una de las más bellas del mundo con sus imponentes escaleras. Inspiró a la escritora Joanne K. Rowling para crear el aspecto de la escuela de magia Hogwarts en las novelas de Harry Potter. Un paseo en teleférico por el río es una de las actividades de ocio locales más populares, al igual que un viaje en barco.

Albufeira, una amplísima gama de actividades

Esta animada localidad costera del Algarve cuenta con una gran cantidad de atracciones para los veraneantes con niños. En particular, playas doradas como la Praia dos Pescadores y la Praia da Oura son atracciones populares en las que se puede chapotear y construir castillos de arena con los más pequeños. Desde el puerto parten embarcaciones que permiten observar delfines o recorrer la bonita costa. A pocos kilómetros de Albufeira, Zoomarine Algarve es sinónimo de un día lleno de acción. Hay toboganes de agua de gran velocidad, loros parlanchines, tiovivos y zonas para tomar el sol. 

Vista aérea de Albufeira

Vacaciones con niños en Portugal: Coimbra

Tanto en la costa como en el interior, Coimbra satisface a los veraneantes en familia. Coimbra es conocida por su venerable universidad y merece la pena visitar la Biblioteca Joanina. Desde su torre se puede disfrutar de una maravillosa vista sobre la encantadora ciudad. El jardín botánico Jardim Botânico y el parque del conocimiento Portugal dos Pequenitos invitan a pasear. Allí se muestran importantes monumentos de Portugal en miniatura. Pero los pequeños exploradores también disfrutarán paseando por la legendaria zona de la Quinta das Lágrimas, con sus ruinas, manantiales y plantas silvestres.

Madeira, el icónico archipiélago portugués

El clima siempre agradable de Madeira la convierte en un destino deseable para las familias durante todo el año. Verá como le pasa el tiempo volando con los paseos por la floreciente campiña y los días de baño en playas únicas como la de Prainha, de oscura arena volcánica. También se pueden realizar actividades de ocio en los alrededores de la ciudad principal. No se pierda el museo interactivo Madeira Story Centre ni el planetario Madeira Magic en Funchal. Salga en barco hacia el océano Atlántico desde Calheta o Funchal para observar ballenas, y en Canical puede aprender más sobre los gigantes del mar en el Museo de la Ballena. La diversión acuática está garantizada con el Aquapark de Santa Cruz. Si viene en época de carnaval, podrá ver los coloridos desfiles que se celebran por toda la isla. 

Vista aérea sobre el fuerte de la ciudad de Faial - Isla de Madeira

Lagos y sus acantilados

En los alrededores de Lagos hay mucho donde elegir cuando se trata de playas. Popular entre las familias, Praia Dona Ana está resguardada entre altísimos acantilados y tiene menos oleaje que otras playas de Portugal. Pero también puede disfrutar del sol en el mar turquesa en Meia Praia o Praia de Batata. El paseo marítimo de Palem es ideal para dar un largo paseo, y el zoológico de Lagos es el lugar perfecto para cambiar de ritmo. Aquí, una granja, una isla de monos, coatíes, cocodrilos enanos y zorros voladores nocturnos de Lyle harán las delicias de los amantes de los animales, tengan la edad que tengan.

Azores, el paraíso natural

Las aisladas Azores son un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza. Ya sea en Sao Miguel, Santa María o alguna otra isla, las playas prometen relajación y diversión en el baño lejos de las multitudes. Mientras que la isla principal, Sao Miguel, cuenta con oscuras playas volcánicas, en Santa María encontrará playas blancas de ensueño. Las Azores también son conocidas por sus aguas termales, donde podrá darse un baño caliente rodeado de vegetación tropical. Para los niños un poco más mayores, el senderismo alrededor de la maravilla natural Caldeira de Sete Cidades con sus lagos azules es una gran experiencia. 

Vista panorámica del lago Lagoa do Fogo en la isla de Sao Miguel - Azores

Parque Nacional de Peneda-Gerês

Visitar el único parque nacional de Portugal es un plan excelente para las familias que buscan unas vacaciones activas. La Peneda-Gerês atrae a los excursionistas con sus magníficos paisajes entre embalses y montañas. Si tiene suerte, podrá ver especies únicas como el perro de Castro Laboreiro o el caballo salvaje marrón de Garrano. Con los niños más mayores se puede pasear por el campo en ejemplares domesticados de esta raza.

Faro, la capital del Algarve

La playa de Faro se extiende de color amarillo dorado a lo largo de 5 kilómetros en el Algarve oriental. Aquí puede pasar días maravillosos chapoteando o cavando con sus hijos. La ciudad en sí le deleitará con su centro histórico, que sigue rodeado de fortificaciones medievales. Su pequeño tamaño hace que la ciudad se pueda recorrer en poco tiempo sin agotar a los más pequeños. Los visitantes más curiosos encontrarán en el Centro de Ciencia Viva del Algarve un destino emocionante con estaciones interactivas que invitan a participar. 

Faro

Ría Formosa

Otro tesoro natural es el paisaje de la laguna de Ria Formosa, cerca de Faro. Con su idílico laberinto de canales de agua, marismas, islas y bancos de arena, está considerado uno de los mayores de Europa en su género. A lo largo de las rutas de senderismo podrán descubrir juntos el singular paisaje y buscar los perros de agua autóctonos y las gallinas púrpura. También se ofrecen diariamente excursiones en barco para la observación de aves.